Otra de las magnitudes de la producción que es interesante controlar es la calidad, que debe ser enfocada desde dos puntos de vista:
• Coste: Desechar materiales o retrabajarlos tiene un coste que según el valor de las materias primas que se utilicen será más o menos importante.
• Producción: Toda la producción que no cumple los estándares de calidad debe ser retrabajada o vuelta a fabricar, por lo que se pierde una capacidad de producción.
Esta parte será más o menos importante según el porcentaje de materiales desechados. Por ejemplo: el caso de estar utilizando centros de mecanizado con acero inoxidable, el coste del desperdicio será alto mientras que la producción perdida no tendrá importancia, pues en general quedará por debajo del 1%.
Otro ejemplo sería el caso de la pintura de herrajes metálicos, donde el coste de los productos desechados es bajo porque se recupera toda la materia prima mediante el decapado, pero se pueden perder porcentajes altos de producción (en ocasiones el 10% o el 15%).